Desde el Café.
Bernardo Gutiérrez Parra.
La noche del 27 de abril después del primer debate por la
gubernatura, Polo Deschamps candidato de Movimiento Ciudadano,
recibió una llamada del dueño del partido Dante Delgado, quien tras
felicitarlo por su participación lo reconvino paternalmente. “Procura
no pegarle tanto a Rocío en el siguiente debate; recuerda que si a
ella le va bien a nosotros también”, le habría dicho.
Obediente, Polo le bajó a sus ataques contra la zacatecana y
denunció que meses antes los Yunes de El Estero lo habían buscado
para pedirle que la golpeara. Este comentario bastó para que se
soltara el rumor de que pronto declinará en favor de Rocío.
¿Será?
Con Dante Delgado todo es posible.
Desde que anunció que su partido iría en solitario en busca de la
presidencia y las gubernaturas cientos de cejas se levantaron. ¿Un
partido con el 9% de la votación nominal aspirando a tanto? “Sí,
recuerden que ya ganamos Jalisco y Nuevo León”, contestaba.
Aunque pronto apareció el peine. Movimiento Ciudadano iría de
esquirol de Morena; cada voto para sus candidatos sería un voto
menos para la oposición. Mediante un apretón de manos a la
distancia porque se supone que se detestan, Dante y López Obrador
sellaron el pacto que le redituará al senador más curules en el
Congreso Federal y más dinero en su cuenta bancaria.
Pero…
En Veracruz las cosas se empezaron a complicar desde antes del
primer debate. La diferencia que Rocío Nahle le llevaba al candidato
opositor Pepe Yunes, comenzó a acortarse hasta quedar
prácticamente en un empate. Ahora, el número de votos que reciba
Polo no serán votos menos para Pepe, sino para la zacatecana.
De ahí que los morenos anden buscando sufragios hasta por debajo
de las piedras. De ahí las amenazas a los alcaldes de la oposición,
veinticuatro de los cuales se sumaron “voluntariamente y sin ser
coaccionados” al proyecto de Rocío Nahle. Y de ahí que estén
viendo en Movimiento Ciudadano su tabla de salvación si la
contienda se cierra aún más.
¿Qué tantos votos le dará Polo a la candidata de Morena? Los que
sean serán bienvenidos, lector. Lo importante es que Dante telefonee
a su candidato para “sugerirle” que decline.
Nomás que quién sabe si ese telefonazo vaya a llegar, al menos de la
forma como desean los morenos.
Este lunes el candidato al senado por MC, Luis Donaldo Colosio
Riojas, pidió al candidato de su partido a la presidencia de la
República, Jorge Álvarez Máynez, que decline a favor de Xóchitl
Gálvez. En entrevista con Azucena Uresti, dijo que dicha estrategia
fortalecerá a la oposición y al mismo tiempo asegurará el bienestar
de la República, lo que debió descomponer del estómago a Dante
Delgado
Por su juventud, por la madurez política mostrada en pocos años,
por su trabajo como alcalde de Monterrey, la ciudad más industriosa
del país y porque como senador de la República será una piedra en
el zapato de Morena, Luis Donaldo es desde ahora candidato natural
de la oposición a la presidencia en 2030. Y su voz pesa, tanto que
con su petición metió en un brete a Dante.
Si el cordobés le ordena a Máynez que vaya en solitario, su partido
alcanzará el 4 por ciento de la votación, suficiente para seguir vivo y
medrando del presupuesto. Pero si le ordena que decline a favor de
Claudia Sheinbaum, aparte de que el mundo de le va a venir encima,
dejará en la indefensión a Xóchitl Gálvez que no tendrá ya nada qué
hacer.
En Veracruz será diferente. Si Polo Deschamps recibe la orden de
seguir en solitario, Movimiento Ciudadano quizá pierda su registro
porque Polo no tiene la exposición mediática de Máynez. Y si le
ordenan que decline a favor de Rocío Nahle declinará en solitario,
porque la mayoría de los emecistas veracruzanos (como en el caso
de Jalisco donde no quieren saber nada de Morena) sufragarán por
Pepe Yunes.
Mientras a Xóchitl sí le hacen falta los votos de Máynez, a Pepe no
le hacen mucha falta los sufragios de Polo. Aún así, en el segundo
debate, le tendió la mano al empresario jarocho y lo invitó a caminar
juntos.
Pero la decisión no depende de ellos sino de su jefe el cordobés.
Gente de su cercanía me dijo que a Dante no le hace ninguna gracia
apoyar en Veracruz a una mujer que aparte de ser zacatecana, se ha
convertido en símbolo nacional de la corrupción. “Sus simpatías
están con Pepe Yunes”, me dijeron.
Su problema es que está entrampado porque López Obrador lo tiene
bien apergollado de ahí mero, lector.
bernardogup@hotmail.com