Punto de Vista
Filiberto Vargas Rodríguez
Prefacio.
En este mismo espacio se anticipó varias veces: la estrategia contra la plaga del
gusano barrenador de ganado no está dando resultados. *** Este martes el
Secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Antonio Berdegué Sacristán,
emitió un Acuerdo que fue publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
El documento modifica un Acuerdo similar emitido en julio del 2024, para activar,
integrar y operar el Dispositivo Nacional de Emergencia de Sanidad Animal
(Dinesa) para hacer frente al Gusano Barrenador del Ganado. *** Esta
modificación tiene como fin prevenir la entrada y diseminación de la plaga -y, en su
caso, controlarla y erradicarla- en las regiones previstas en el artículo 134 del
Reglamento de la Ley Federal de Sanidad Animal (RLFSA), con el fin de disminuir
el impacto económico y social que pueda causar. *** “Esta ampliación se
considera necesaria debido a que la plaga se encuentra en el sur y centro del
país, existiendo el riesgo de que se disemine hacia zonas ganaderas libres del
norte de México”, se explica. *** El Dispositivo Nacional de Emergencia de
Sanidad Animal se activa cuando se detecta o se tiene evidencia científica sobre
la presencia o entrada inminente de enfermedades y plagas exóticas y de
notificación obligatoria que pongan en situación de emergencia zoosanitaria a
animales en todo o en parte del territorio nacional. *** La plaga del gusano
barrenador es exótica, altamente transmisible y afecta a animales de sangre
caliente; la infestación ocurre cuando una mosca deposita huevos en heridas
superficiales de mamíferos, y las larvas eclosionan para alimentarse de tejido vivo.
*** El Acuerdo es de observancia obligatoria en todo el país. Los sujetos obligados
incluyen a las Secretarías de Desarrollo Agropecuario, propietarios de animales
susceptibles, médicos veterinarios en el libre ejercicio de la profesión,
importadores de animales susceptibles, y personas que transiten con animales de
compañía. *** Entre las medidas zoosanitarias de aplicación urgente y coordinada,
para el diagnóstico, prevención, control y erradicación, se ordenan la notificación y
regulaciones de movilización, por lo que se debe presentar el Certificado
Zoosanitario de Movilización (CZM). *** En el caso del estado de Veracruz, los
reportes señalan que la corrupción es descarada en el Punto de Inspección de
San Rafael, donde piden hasta 10 mil pesos por tráiler al que le detecten un
animal con heridas. Con ese pago -dicen- tienen permiso para pasar por todo el
Estado. *** Así no habrá plan de contención que funcione y las fronteras con
Estados Unidos seguirán cerradas, con millonarias pérdidas para los productores.
Imagine usted, jefe de familia, que llega un día a su casa y le informa a su pareja
que fueron saldadas las más importantes deudas, esas que no los dejaban dormir.
Si su pareja no está informada de algún ascenso en su trabajo, si no tiene noticias
de que haya usted recibido alguna herencia o se haya ganado algún sorteo
millonario, lo más probable es que lo cuestione: ¿Y de dónde?
Le juro que si le responde: “me propuse ahorrar, administré mejor mi salario”, no
se lo va a creer.
Por lo tanto, las preguntas que se hace el dirigente estatal del PAN, Federico
Salomón Molina, son muy válidas: ¿de dónde sacó dinero Rocío Nahle para saldar
-como ella dijo- buena parte de la deuda del gobierno estatal?
Su teoría va por buen camino: “Simplemente fue una condonación que el gobierno
del estado obtuvo con diferentes instancias, como el SAT, el MSS y el ISSSTE”.
Incluso en las propias filas de Morena hay dudas que piden que sean aclaradas.
El senador Manuel Huerta dijo que el gobierno estatal debe aclarar las cifras de la
deuda de Veracruz y especificar lo que dejó el gobierno de Cuitláhuac García y lo
que disminuyó este último año.
“A mí ahí, con sinceridad, lo veo como oportunidad, pero entre lo que estuve
leyendo toda la mañana y lo que informó Cuitláhuac (García) de la deuda que
había y lo que se dijo ayer, es una oportunidad para que se aclaren las cuentas”,
afirmó.
Y se remontó a los tiempos de Javier Duarte, cuando -dijo- se hablaba de un
saqueo de más de 80 mil millones de pesos. Lo mejor, admitió, es que el gobierno
de Rocío Nahle explique qué pagó y cuánto falta por pagar:
“Tienen que aclararnos bien, porque Cuitláhuac (García) decía que él había
reducido la deuda. Se hablaba de 61 mil millones de pesos y ayer nos surgieron
109 mil millones. Entonces, aunque Rocío (Nahle) precisó que pagó deudas del
SAT y del ISSSTE a la mitad, pues como que se tiene que profundizar y es la
oportunidad que veo. No vaya a ocurrir que a Chuchita la bolsearon”.
Este miércoles 3 de diciembre, justo al mediodía, Rocío Nahle habrá de
comparecer ante el Poder Legislativo para despejar todas las dudas que tengan
los diputados. Con seguridad habrá quien le pida que explique con detalle cuál fue
la deuda que dejó Cuitláhuac García, cuánto fue lo que ella pagó y cuánto le
condonaron instancias como el SAT, el IMSS y el ISSSTE.
Deberá explicar de dónde salió el recurso para hacer esos pagos, cuál es la deuda
que queda y cuánto le costará a su gobierno cada año.
Todos los que vivimos en este bello estado queremos que le vaya muy bien. Si
Rocío Nahle consiguió lo que no habían logrado cuatro gobernadores que la
antecedieron, será digno de reconocer. Hasta ahora, la percepción es que está
jugando con los números para aparentar un logro que está realmente lejano.
Y es que… si no amortizó la deuda, entonces ¿qué hizo en su primer año?
Las carreteras siguen intransitables, no hay obras de infraestructura, las medicinas
-con todo y “camionetitas”- siguen sin llegar a los centros de salud; la inseguridad
y la violencia no tienen fin. La educación estaba en crisis y no ha mejorado gran
cosa, las inversiones no se ven y el campo sigue en el abandono.
¡Ah, pero eso sí! El centro de Xalapa se llenó el pasado domingo de veracruzanos
que acudieron de manera espontánea a reconocer su labor.
Ja, ja, ja.
Epílogo.
Era una práctica recurrente de los viejos contadores: tenían anotadas las fechas
en las que se presentaban desastres naturales de gran calado y se utilizaban de
pretexto para omitir la entrega de documentos relevantes a la Secretaría de
Hacienda. *** “Lamento informarle que debido a las torrenciales lluvias que
azotaron esta región del país, se perdieron los archivos donde se daba puntual
seguimiento a los movimientos financieros de esta empresa”, escribían los
contadores. No había forma de refutarlos. *** Ya no es así. De algo ha servido la
tecnología y que organismos de fiscalización conozcan muy bien esos trucos. La
auditora general del Órgano de Fiscalización Superior (Orfis), Delia González
Cobos, advirtió que algunos alcaldes de la zona norte (entre tres y cuatro)
pretenden justificar inconsistencias en algunas obras, con el argumento de que las
“lluvias e inundaciones les afectaron”. *** Ese cuento no les va a servir, pues con
anterioridad a esas lluvias e inundaciones, todos los entes fiscalizables debieron
entregar informes de obras inconclusas o cuya calidad no era la adecuada.
Además, el Orfis tiene los avances de los reportes trimestrales de la obra pública.
*** Como dirían en mi pueblo: “a otro perro con ese hueso”.
filivargas@gmail.com
