MOLE DE GENTE.
VIRGINIA DURAN CAMPOLLO.
“El pueblo pone y el pueblo quita. No es alguien que grita” expresó
visiblemente alterado el gobernador de Sinaloa Rubén Rocha. Con
un cinismo que altera la comprensión el delincuente -enlace con la
delincuencia- tiene ensangrentado a Sinaloa liquidado de muchas
maneras económica, social y políticamente. Considerado uno de
los puertos turísticos mejor posicionados a nivel nacional está
paralizado. De los más fructíferos y bellos del país. Donde la
población vivía en paz y produciendo antes de que las bandas
entrarán en conflicto y el gobierno quedará atado de manos
postrado. *** En varios puntos llevan meses de intensas balaceras,
secuestros, explosión de artefactos, descuartizados. Un infierno
que ha trastocado la vida apacible de sus habitantes que viven en el
terror, miedo y desesperación. Claman justicia y exigen a las
autoridades, pero no los escuchan. El clasificado narco gobernador
Rocha, protegido por la presidente, se ufana de su impunidad. El
secretario de seguridad pública (con minúsculas) Harfuch ha dado
resultados. Su presencia altera a los delincuentes que se solazan en
sus crímenes. *** Esa ridícula expresión del pueblo manda es una
torpe propaganda de gobierno que muestra su pequeñez. ¿Cuál
pueblo? Los millones de pobres; los cientos de miles de familiares
de asesinados, desaparecidos, secuestrados; las madres que han
perdido a sus hijos por cáncer; los muchos más que por falta de
medicamentos sufren con enfermedades terminales; los que ya no
puede atender el sector público por sus deficiencias. Debiera haber
más respeto y dar resultados. *** El pueblo que paga impuestos-
por servicios de pésima calidad- recibe el desprecio de un gobierno
corrupto, ineficiente, indigno, apátrida y es vapuleado, marginado.
*** Una golondrina no hace verano, Claudia.** Y para las agruras…