PABLO.

Feb 26, 2024 | Columnas

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Sin tacto.

Por Sergio González Levet.

Si hay un colaborador cercano, afín, leal a Pepe Yunes Zorrilla, es -no me lo
negarán- Pablo González Madrazo. Quienes conocen a Pepe desde hace muchos
años han recorrido su historia con su impecable asistente siempre a un lado, a la
mano, dispuesto.
Son tantos años de trabajo juntos que nuestro protagonista de este “Sin tacto”
terminó por mimetizarse de tan manera con su jefe, que hay quien no distingue los
modos amables y llenos de urbanidad de uno y otro (incluso, no falta en la
picaresca política estatal el que ha dicho que Pablo ha terminado por parecerse
mucho a Pepe; es más, a parecerse a Pepe más que el propio Pepe, je).
Pero Pablo González es una pieza importante en el tablero político del diputado
con licencia de Perote. Él conoce como nadie el pensamiento y las aristas del
carácter de quien será inevitablemente el candidato del frente opositor para la
gubernatura de Veracruz… y por eso, el hombre más solicitado de Veracruz.
Hablar con el licenciado González Madrazo es saber con precisión a qué se
puede atener alguien cuando solicita una reunión o un acuerdo con Pepe. Es –rara
avis- un secretario que no miente ni hace promesas falsas a quien lo busca como
conducto para llegar al jefe.
Son famosas las largas explicaciones que suele dar, sin saltar un ápice su
urbanidad, a quien no podrá ser recibido o atendido o apoyado. Dicen que muchos
hasta terminan dándole las gracias por esas negativas tan bien sorteadas.
Pablo González empezó su relación con la familia Yunes de Perote a través de
Ramsés, el supercomunicador. Allá en 1996, cuando ambos tenían pelo y eran
unos muchachones apenas, hicieron un programa de noticias por radio y junto con
ello una amistad que ha resistido el paso de los años, los quinquenios y las

décadas. Cuatro años después, cuando arrancaba el milenio, Pablo empezó a
trabajar junto a Pepe, el hermano mayor, y ha continuado ahí por 23 años sin
mácula ni pausas ni menos desviaciones.
Hoy, cuando se ha instalado la intercampaña, el siempre fiel Pablo, el confiable,
el capaz regresa a ejercer su función más conocida y para algunos paradigmática,
la de secretario particular, esta vez del precandidato como lo fue del diputado local
y federal, del senador, del diputado y lo será con toda seguridad del Gobernador,
cuando los tiempos lleguen y se cumpla la profecía ciudadana.
Y mientras está ahí, sorteando con éxito las abrumadoras peticiones, las
suaves o agresivas presiones, las solicitudes implorantes de miles y miles que se
quieren acercar a la esperanza actual de Veracruz para decirle que están con él y
que confían en su liderazgo.
Y Pablo siempre contestará: “Con gusto lo veo, si usted me permite el
atrevimiento…”

sglevet@gmail.com